⚔️ First Berserker: Khazan – Análisis Completo

Una bestia despierta, y la fórmula Soulslike sigue rugiendo

Hay juegos que no vienen a reinventar la rueda, sino a afilar sus bordes. First Berserker: Khazan no oculta sus raíces: bebe directamente del manantial oscuro de FromSoftware. Sin embargo, lo hace con orgullo, tomando lo mejor de títulos como Sekiro o Elden Ring, y añadiendo su propio estilo anime brutal y exagerado. ¿El resultado? Un Soulslike crudo, desafiante y sorprendentemente refinado, con mecánicas que premian al jugador que observa, aprende… y sufre con dignidad.

⚔️ Un combate tan duro como justo

Desde el primer combate sabes que aquí no vienes a pasear. Khazan es duro, exigente, y está repleto de jefes que te pondrán a prueba una y otra vez. La clave está en el parry: los enemigos tienen barras de resistencia que puedes romper con contraataques bien medidos, dejándolos abiertos para devastadores remates. El sistema recuerda a Sekiro, pero con una ventana de parry más generosa, haciendo que incluso jugadores menos expertos puedan entrar en la danza del filo con algo de práctica.

Y como buen Soulslike, el juego no necesita diálogos para enseñarte. Por ejemplo: ves un jabalí muerto, con una lanza clavada en la cabeza. Avanzas unos pasos y un jabalí salvaje carga contra ti. Si haces lo obvio —usar la lanza— lo derribas de inmediato. Es diseño ambiental puro, del tipo que Dark Souls convirtió en arte.

🛠️ Evolución con libertad

El árbol de habilidades también brilla con luz propia, no tanto por su originalidad, sino por su flexibilidad. Muy similar al de Black Myth: Wukong, puedes reiniciar y reasignar tus puntos en cualquier momento, permitiéndote experimentar sin miedo a errores. ¿Quieres cambiar de estilo de juego porque un jefe se te atraganta? Adelante, reconfigura todo y vuelve al ruedo.

A eso le sumamos una progresión generosa. Aunque mueras en un jefe, ganarás algo de experiencia por intentarlo, así que incluso los fracasos alimentan tu crecimiento. Además, el loot es constante y satisfactorio, con mejoras claras y un sistema de crafteo en el hub central, The Crevice, que evoluciona con tus avances.

🕷️ Detalles de accesibilidad y estilo visual

Un detalle muy bienvenido es la opción para activar o desactivar la aracnofobia. Si no te llevas bien con las arañas, el juego suaviza esos encuentros, algo que debería ser más común en el género. Por otro lado, el estilo visual es un atractivo potente: mezcla personajes de estética anime con escenarios oscuros y realistas, dando como resultado un contraste visual muy llamativo.

📉 Historia floja, pero visualmente impactante

La narrativa es el punto más débil. La historia de Khazan —poseído por un espíritu poderoso mientras busca redención— no sorprende ni profundiza demasiado. Las escenas tipo motion comic tampoco ayudan. Aun así, algunos jefes y cinemáticas están tan bien diseñados visualmente que compensan la falta de desarrollo argumental.

👹 Bosses, desafíos y opciones

Si esperas accesibilidad, ojo: aunque hay un modo “fácil”, sigue siendo brutal. Algunos jefes en este modo son más difíciles que en Elden Ring. Sin embargo, tienes herramientas: puedes mejorar a Khazan, convocar fantasmas para ayudarte (¡sí, hay sistema de invocaciones!) y utilizar objetos curativos especiales. El diseño de niveles también se siente familiar: atajos, zonas envenenadas, y enemigos que castigan tu impaciencia.

✅ Veredicto final

First Berserker: Khazan no es original, pero eso no le impide ser excelente. Toma prestado, mejora lo prestado, y lo combina con sistemas sólidos, un combate adictivo y jefes memorables. La narrativa podría haber dado más de sí, pero la experiencia jugable compensa con creces.

🎯 Puntuación final: 8.5 / 10
Un Soulslike bien ejecutado que, aunque no revoluciona el género, sí lo honra con fuerza, garra y una jugabilidad adictiva. Si te gusta sufrir con estilo, aquí tienes una nueva cruzada.

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